La cuatro áreas de impacto corporativo en crecimiento inclusivo

Valor económico

La primera de esas grandes áreas es la creación de valor económico. Solo aquellos negocios que alcancen el éxito podrán lograr impactar positivamente en la sociedad. ¿Cómo generan riqueza las empresas? Sobre todo, a través de la creación de empleo (y mantenimiento de empleo), apostando por la innovación e invirtiendo de forma responsable y sostenible.

Valor social

La tercera dimensión de análisis es el valor social que las empresas pueden generar a través de sus actividades empresariales. Aquellas compañías que manifiesten estar comprometidas con la inclusión incorporarán políticas que garanticen y mejoren la diversidad en la plantilla y la integración laboral de personas en situación desfavorecida, dedicarán esfuerzos a la creación de productos y servicios inclusivos, y apostarán por la formación y el desarrollo de sus equipos, entre otros aspectos.

Prácticas éticas

La segunda dimensión engloba temas como el respeto a los derechos humanos en la cadena de valor, la compensación justa, o el diseño y venta responsable de productos y servicios. Son clave los aspectos de salario digno, protección social y la reducción de brechas salariales.

Promoción del crecimiento inclusivo

La cuarta dimensión analiza la capacidad de las empresas en la promoción del crecimiento inclusivo interna y externamente. Esto es posible cuando las empresas establecen un propósito corporativo que incorpora el impacto positivo en la sociedad. Los criterios de gobierno ESG -que hacen referencia a factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo-, también son mecanismos fundamentales para promover un modelo más inclusivo. Se estudian también el esfuerzo de trabajar con otras empresas y en coordinación con el sector público, sindicatos, ONG y academia para transformar la industria hacia un modelo más inclusivo.