III Taller de expertos para la investigación ‘Crecimiento inclusivo 2020’

¿Qué une a estas personas, un miércoles de otoño, a través de las pantallas de sus ordenadores? Uno de ellos dirige las relaciones externas de un despacho de abogados; otro es el mayor experto de RSC de una gran consultora. Están la directora de desarrollo de negocio de un banco de inversión y la directora de proyectos de una fundación… En total, personas con un interés común, que han ido fraguando desde hace meses: el crecimiento inclusivo.

Con los talleres de expertos, buscamos aproximarnos cada vez más a las consecuencias prácticas. En el tercer taller de este año, hemos contado con personas que trabajan en Uría Menéndez, Arquia, Arcano, Sodexo, Fundación Tomillo y Fundación Codespa. Los asistentes nos dividimos en dos salas de trabajo en zoom.

“Para mí es un placer participar en estos talleres. Desde EDP compartimos plenamente la visión de Crecimiento Inclusivo del Observatorio”, comenta Alfredo Menéndez Morán, responsable de Mejora Continua en EDP. “Hoy hemos concretado el camino hacia esa meta”. De sus apuntes, extraemos una guía hacia el crecimiento inclusivo que puede servir a empresas de cualquier tamaño y sector:

• Diagnóstico: conocer la desigualdad en todas sus formas y cómo afecta a cada grupo de interés.
• Planificación: después de escuchar y comprender, definir acciones capaces de crear valor compartido.
• Pasar a la acción: a través de la innovación social, encontrar nuevas formas de satisfacer necesidades sociales y ser motores de cambio.
• Evaluación y mejora continua: cerrar el ciclo a través de la medición del impacto y retorno social, más allá del retorno económico.

Esta es, en efecto, la conclusión más consensuada entre los participantes: necesitamos soluciones de crecimiento inclusivo que puedan verse como una inversión, no solo como un coste, y que tengan retorno para el negocio. Porque no basta con desarrollar proyectos de inclusión; el cambio solo puede venir de ser inclusivos. Pero, ¿cómo?

Empezar desde dentro de la empresa

Cabe, por ejemplo, diversificar la oferta creando productos específicos para el grupo de personas que se quiere incluir. O se puede ofrecer el mismo producto que al público general, pero flexibilizando algunas condiciones. Es una manera más de personalizar la oferta, con empatía, aplicando un filtro social a la mirada de negocio.

Para ello, un primer paso es desarrollar un estudio de materialidad en clave de negocio. Es decir, conocer qué temas son importantes para la empresa, para su negocio y para sus grupos de interés. Otro aspecto clave debatido entre los expertos es mejorar la comunicación interna. Es fundamental que los empleados conozcan los ODS sobre los que las empresas están actuando, conozcan con datos los resultados obtenidos (de ahí la gran importancia de la medición del impacto social) y se conviertan en embajadores dentro de las empresas para seguir apostando por un crecimiento más inclusivo.

Estas y otras reflexiones de los expertos se verán recogidos en la publicación de crecimiento inclusivo del Observatorio.